Arqueólogos descubren sinagoga samaritana en el Valle del Jordán

Sinagoga samaritana en el Valle del Jordán

Arqueólogos israelíes han descubierto una antigua sinagoga samaritana en el Valle del Jordán, con una curiosa inscripción en la que se lee: "Este es el templo", informó la Dirección de Antigüedades de Israel.

De unos 1.500 años de antigüedad, la sinagoga se encuentra al sureste de la antigua ciudad de Beisán, en el norte del valle del río Jordán, y fue descubierta hace unos días en excavaciones destinadas a ampliar la zona urbana de la moderna Bet Shean.

«El descubrimiento de otra sinagoga samaritana en la zona agrícola del sur de Bet Shean nos ofrece nueva información sobre la población samaritana de aquel período», dicen en un comunicado los arqueólogos Walid Atrash y Yaacov Harel, directores del proyecto.

Se trata del período inmediatamente anterior al que comenzó a decaer la comunidad, que en tiempos romanos había llegado a tener más de un millón de habitantes. Los bizantinos, por medio de masacres, los obligaron sin embargo a convertirse al cristianismo a partir del siglo VI, lo que fue mermando su número progresivamente hasta los poco más de 700 miembros con los que cuenta en nuestros días.

Con ello, agrega la nota, «parece que las estructuras descubiertas fueron construidas al final del siglo V y estuvieron en uso hasta la víspera de la conquista musulmana en el 634». En el período bizantino, Beisán, a sólo unas decenas de kilómetros del Monte Gerizin -santuario próximo a la ciudad palestina de Naplusa-, se convirtió en un importante centro samaritano e incluso llegaron a disfrutar de cierta autonomía bajo el liderazgo de un guía espiritual conocido como Baba Rabbah.

Mosaico con inscripción: "Este es el templo".

Hacia el final del reinado del emperador Justiniano (483-565) los samaritanos se rebelaron contra el Imperio Bizantino. «La rebelión fue sofocada y los samaritanos dejaron de existir como nación», agrega la nota de prensa. De origen incierto, los samaritanos se consideran a sí mismos los verdaderos descendientes del pueblo de Israel, y aún conservan intactas muchas de las costumbres de épocas bíblicas. Para los judíos, que le atribuyen orígenes babilónicos, los samaritanos son descendientes de extranjeros paganos convertidos al judaísmo por interés en el siglo VI a.C.

La sinagoga descubierta consiste en una sala de rezos de 8 metros por 5 que habría sido el centro espiritual y social de la comunidad, y que, como otras, está levantada en dirección al Monte Gerizim. El suelo del templo es un colorido mosaico de piezas geométricas y una inscripción en griego en el centro de la que sólo ha sobrevivido la última línea: «... Este es el templo».

Lea Di Segni, experta de la Universidad Hebrea de Jerusalén que ha traducido la inscripción, corrobora que se trata del tercer templo samaritano descubierto en la zona después de los denominados «Bet Leontis» y «Tel Iztabba».

Junto a la sinagoga había una granja de unos 1.500 metros cuadrados con un patio central rodeado de almacenes, una residencia, una sala de invitados e instalaciones para la fabricación de distintos productos. AcontecerCristiano.Net
Con tecnología de Blogger.